La televisión pública en lengua neerlandesa de Bélgica, VRT, reclamó este lunes a Eurovisión “total transparencia” sobre las reglas y sistema de votación en el festival, un día después de que RTVE pidiera a los organizadores una auditoría del televoto español para saber cuántos votos recibió cada país.
“VRT pide a la Unión Europea de Radiodifusión (UER) total transparencia sobre las reglas y el sistema de votación y hace de nuevo un llamamiento explícito a entablar un debate con todos los países, por compromiso y preocupación sincera por la supervivencia del concurso”, dijo la portavoz de la cadena, Yasmine Van der Borght, en un comunicado.
Van der Borght subrayó que la cooperación entre VRT y la UER es buena “en muchos ámbitos”, pero que “sin una respuesta seria a nuestras preocupaciones sobre Eurovisión, ponemos en duda nuestra participación futura”, dando a entender que podría no acudir al festival del 2026, que será especialmente festivo por ser el 70.º aniversario de la fundación del certamen.
VRT (siglas de la Organización de Radiotelevisión Flamenca) asegura que en los últimos meses ha intentado “en la medida de lo posible entablar un debate de fondo sobre Eurovisión”, y que se ha topado con “poca disposición para iniciar esta conversación en profundidad”.
El sábado en Basilea, la ciudad anfitriona, Israel rozó la victoria en el festival –que en el último instante se llevó Austria- aupada por el televoto, logrando la máxima puntuación del televoto del público (doce puntos) en trece países, entre ellos España y Bélgica. Los otros países cuya audiencia dio doce puntos a la representante israelí fueron: Alemania, Australia, Azerbaiyán, Francia, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal, Reino Unido, Suecia, Suiza y el 'Resto del mundo', que computa como un solo país.
La cadena belga interrumpió su retransmisión durante la actuación de Israel en la final, como había hecho ya en la edición del 2024, y mostró una pantalla en negro en la que acusaba a Israel de violación de los derechos humanos en Gaza y de destruir la libertad de prensa, y reclamaba un alto el fuego. Pese a que la audiencia belga no pudo ver esa noche en directo la actuación de la israelí Yuval Raphael con su balada New day will rise, el televoto le dio doce puntos, mientras que el jurado profesional belga le otorgó cero puntos.
“Observamos que Eurovisión, tal como está organizado actualmente, es cada vez menos un evento unificador y apolítico. Cada vez entra más en contradicción con los valores originales del certamen y con los valores del servicio público de radiodifusión”, añadió VRT en su comunicado. En la primera semifinal, el pasado martes, la cadena emitió un anuncio que decía: “Israel tiene voto en el concurso de canciones, el pueblo palestino no. Les damos voz”.
VRT es la empresa pública de radiotelevisión belga dirigida a la audiencia de habla neerlandesa de la región de Flandes y de Bruselas. VRT y las empresas RTBF (en lengua sa para la comunidad Valona) y BRF (para la comunidad germanohablante) forman la radiodifusión pública de Bélgica en las tres lenguas oficiales del país. El representante belga este año en Eurovisión, Red Sebastian con Strobe lights, fue eliminado en la primera semifinal y, por tanto, el sábado no compitió.