Una carta de amor a la prenda más elegante y versátil de nuestro
armario.
Desde Audrey Hepburn a Michelle Obama, el vestido negro ha sido la prenda estrella en miles de ocasiones y eventos de toda clase a lo largo de la historia.
Un vestido negro siempre resulta apropiado. Impulsado por Coco Chanel en 1920, el little black dress redefinió el vestuario de la mujer. A través de sus ilustraciones, Megan Hess nos lleva a recorrer la historia contemporánea, nos explica cómo ha marcado cada década desde su aparición y destaca algunos looks que han quedado grabados en la memoria colectiva, desde el icónico diseño de Givenchy en Desayuno con diamantesal atrevido vestido de la venganza de Lady Di.
MEGAN HESS
Megan Hess nació para dibujar. Tras formarse en diseño gráfico y especializarse en dirección artística, trabajó para algunas de las principales agencias de diseño del mundo. En 2008 ilustró el éxito de ventas Sexo en Nueva York, escrito por Candace Bushnell y publicado por The New York Times. Desde entonces, ha dibujado para Dior Couture, ha creado emblemáticas ilustraciones para Cartier y Louis Vuitton en París, ha imaginado animaciones para Prada y Fendi en Milán, ha ilustrado los escaparates de Bergdorf Goodman en Nueva York y ha creado una colección cápsula de bolsas para los londinenses Harrods. El distintivo estilo de Hess también se puede encontrar en artículos para el hogar y grabados de edición limitada que se venden en todo el mundo. Algunos de sus prestigiosos clientes son Chanel, Dior, Fendi, Tiffany & Co., Saint Laurent, Vogue, Harper’s Bazaar, Harrods, Cartier, Balmain, Louis Vuitton y Prada.
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